#NuestrosProgramasNoParan
Los últimos meses hemos experimentado el aislamiento social derivado de la pandemia Covid19, lo que nos ha permitido echar mano de todas las actividades en línea o por televisión que hemos podido, nos hemos convertido en panaderos haciendo pan de plátano o el dalgona cofee; e incluso hemos retomado el ejercicio que teníamos abandonado gracias a las clases por redes sociales; sin embargo, no hemos dejado de leer de gente que se ha deprimido, otros tantos ya no soportan a su familia o a sus rommies e incluso existe evidencia del aumento de la violencia de género en los hogares.
Hoy más que nunca nos damos cuenta que el aislamiento puede implicar daños a nuestra integridad física y emocional, este contexto puede brindarnos la oportunidad de sentir más empatía por las personas que se encuentran privadas de la libertad, quienes se convierten en un grupo en situación de vulnerabilidad por el contagio del Covid19 debido a la sobrepoblación de los centros penitenciarios, lo que pudiera convertirse en un efecto amplificador; en ese sentido, los centros penitenciarios han tomado diversas medidas de prevención como son el uso de equipamiento de protección personal para trabajadores y personas privadas de la libertad, puntos de valoración al ingresar, reorganización de las visitas semanales e incluso la liberación anticipada de algunas personas.
Ante estas circunstancias en La Cana nuestra principal labor de reinserción social se ha visto afectada en nuestros ejes de Salud Mental y Educación, Arte, Cultura y Deporte, que son fundamentales para evitar efectos negativos en la salud emocional y física de las mujeres privadas de la libertad con quiénes trabajamos; así que nos dimos a la tarea de recolectar diversas actividades que les permitirán mantener ocupado su mente y su cuerpo, que van desde ejercicios de gimnasia cerebral, pasando por clases de inglés, hasta ejercicios funcionales; además de diseñar actividades que ellas podrán realizar semanalmente y nos enviarán sus avances, cómo el caso del club de lectura, que gracias a todos nuestros donantes y equipo de servicio social fue posible recolectar 100 libros de "El Principito".
De esta manera, el armado de las actividades incluye libros, cuadernos, lápices, acuarelas y la carpeta de actividades que las guiará:
Sin duda alguna este distanciamiento ha sido complicado para todos y en La Cana extrañamos convivir con las chicas que participan en nuestras actividades, así que añadimos un mensaje especial para ellas, lleno de esperanza y amor.
Hoy agradecemos a quienes hicieron posible el envío de estos materiales a las mujeres privadas de la libertad, por medio de sus donativos.